Son los momentos más inesperados de la vida los que encienden un fuego desde lo profundo, momentos que te sacuden hasta el fondo y te hacen despertar pasiones ocultas.
Al rededor de 1990, en medio oriente nace Shiló, aunque para ese entonces no lo sabía. Mi mundo estaba patas arriba en tierra desconocida y apenas hablaba el idioma cuando surgió esta idea de crear algo, el primer esbozo de Shiló.
Siempre he tenido una inclinación artística y amor por las joyas. Aunque no tenía idea de cómo empezar, ni cómo se vería, sabía perfectamente que haría el tipo de joyería que quería usar.
Me lancé de lleno al proyecto, aprendí, viajé, seleccioné piezas únicas, hice croquis en servilletas, dibujé mis dedos, di vueltas y al fin creé. A veces he tomado demasiados riesgos y otras veces debería haber tomado más, pero la pasión siempre fue mi motor y de eso se trata la vida.
Shiló nació con visión y propósito claros, con tantos contratiempos como milagros, celebrando la individualidad y la singularidad, desde la mística y la espiritualidad.
Shiló se trata de adornarse con piezas que sientas como una expresión de lo que eres, nuestras piezas de joyería están diseñadas para usar algo que te hace sentir bien desde dentro, son únicas y versátiles creadas para que en ellas encuentres poder alquímico.
Buscamos traer el alma al centro de atención, resignificar el proceso de compra, y formular una visión integral y holística de adquisición de joyas. Elegimos alejarnos de la moda descartable con piezas atemporales, de calidad y poco convencionales.
Nuestras piezas fueron hechas para quien lo desee, sin importar su genero, edad o historia, espero que disfrutes tanto de tu joya como en Shiló disfrutamos de crearla.
Nora, creadora de Shiló.